Nicolás Bastarrica, preparador físico de San Lorenzo de Almagro, encaró su segundo año de trabajo en el club de Boedo, el decimosegundo como responsable del área física en un equipo en la Liga Nacional tras sus dos pasos por Quilmes de Mar del Plata (2004-2010 y 2013-2015) y La Unión de Formosa (2010-2013).
“El grupo viene respondiendo bastante bien, con las molestias normales de una pretemporada”, comenta Bastarrica, quien contó cómo se desarrollan los trabajos del actual campeón en el flamante Polideportivo Roberto Pando.
- ¿Cómo estás desarrollando los trabajos en esta pretemporada de San Lorenzo de Almagro?
- Comenzamos el 16 de agosto con evaluaciones físicas, ergometrías. Hicimos evaluaciones de potencia. También el médico y el kinesiólogo hicieron sus respectivas evaluaciones. Más allá que estamos haciendo el turno integrado de unas tres horas de entrenamiento, el grupo viene respondiendo bien.
- ¿Cuáles son las tareas que más se focalizan en esta parte del año?
- Durante esta parte de la pretemporada estamos haciendo bastante trabajo de fuerza, preventivo, de movilidad articular, trabajo de resistencia y energético. Son más que nada puntuales. También se hacen trabajos de agilidad, velocidad. La idea es ir alternando los sistemas energéticos para no repetir muchos los estímulos y generar una sobrecarga. Buscamos complementar la parte física con el trabajo de básquet.
- Individualmente, ¿cómo viste a los jugadores?
- Se están poniendo en ritmo, Marcos Mata venía con el esguince de rodilla, le falta recuperar un poco más la parte muscular, por eso trabajamos en la estabilidad de la rodilla y los ejercicios de básquet los está haciendo muy bien. A Selem Safar yo lo tuve desde las inferiores y sé lo que puede hacer y lo que no. Me sorprendieron Mathías Calfani y Santiago Scala por la capacidad de trabajo que tienen, la verdad que entrenan mucho y le ponen una gran intensidad en lo que hacen. Jerome he hablado antes de la pretemporada, su historia de entrenamiento es bastante importante y Guillermo Díaz es muy respetuoso y hace lo que tiene que hacer eso vale oro. Matias Sandes y Nicolás Aguirre muy bien, con gran predisposición.
- ¿Qué cambia en tu trabajo el estar en pretemporada al estar en plena temporada?
- El desarrollo táctico y físico, que depende mucho del jugador si juega poco o mucho. Si tiene pocos minutos se puede compensar más y agregar trabajo. Los que vienen jugando con una media grande, hay que recuperarlos, ir poniéndoles cargas de entrenamiento para que lleguen de la mejor manera al partido siguiente. Se desarrolla más con los que tienen menos minutos y con los que juegan más se van haciendo pequeñas cargas para mantenerlos en cancha.
- ¿Cómo es trabajar en este nuevo predio, el Polideportivo Roberto Pando?
- Hoy por hoy estamos en nuestra casa. La verdad que las comodidades que tenemos nosotros a la hora de trabajar, de planificar, son geniales. Está la oficina de entrenadores, en el vestuario tenemos kinesiología donde se trabaja con los jugadores. Al lado de las duchas tenemos las piletas de inmersión para utilizar luego del entrenamiento, para usarlas con agua fría o caliente. En la cancha, espectacular, tenemos espacios en las cabeceras. El gimnasio está quedando muy bien. Nos queda cómodo tener todo en el mismo lugar. Tener las disponibilidades cerca. Restan algunos detalles para complementarlo, pero realmente está 10 puntos para realizar una pretemporada.